La Iglesia de San Miguel de Luerces es un templo del siglo XI, de origen románico.

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Su cesión a la Iglesia de Oviedo, por Martín Vermúdez en 1079, se cita en el Libro de los Testamentos de la Catedral de Oviedo. También está documentada en 1492 su pertenencia al Monasterio de Cornellana.

Cuenta con una sola nave y cabecera rectangular, que están separadas por un arco de triunfo de medio punto. La fachada principal, con un pórtico cerrado al norte, la puerta de ingreso con arco de medio punto y un campanario en espadaña.

Desde el exterior se puede observar su fábrica románica en el presbiterio, espacio que precede al altar mayor, con cantería trabajada, que se levanta sobre un zócalo tallado en diente de sierra, con remate de canecillos y con una ventana saetera con vidriera. Estos elementos decorativos de la piedra se repiten en la base de la pila bautismal y en las columnas de arco de triunfo del interior del templo.

La nave tiene coro, cubierta plana de madera y sacristía. El ábside se cubre con bóveda de cañón y está decorado con interesantes pinturas murales del siglo XVII. 

-En el testero se representa la Anunciación de la Virgen, con el Arcángel San Gabriel y la Virgen en la parte baja, sobre un zócalo en damero romboidal, y sobre ellos el Padre Eterno y, a un lado, el Arcángel San Miguel.

-En el muro interior de la ventana saetera se representan, a un lado, Adán y, al otro, Eva con el Arbol del Bien y el Mal y la serpiente enroscada.

-En el muro derecho se representan escenas de la vida de Jesús, con el Nacimiento, la Adoración de los Reyes Magos y la Huida a Egipto, con la Virgen con el niño en brazos y José asiendo la montura.

-En el muro izquierdo se muestran escenas de la Pasión de Cristo, con Jesús ante Pilatos, el Ecce Homo, la Vía Dolorosa y la Crucifixión.

-El techo de la bóveda también está decorado con la representación del Tetramorfo: San Mateo (el hombre), San Marcos (el león), San Lucas (el toro) y San Juan (el águila). Se completa la decoración del techo con el sol, la luna y estrellas.

El templo conserva además tres retablos, uno de ellos barroco del siglo XVII y los otros dos de estilo neoclásico popular, con tallas de los siglos XII, XIV y XV.